Aquí y allá, iguales

La situación suscitada la semana anterior en torno al Hagamos Historia femenino, ha desatado una polémica de la que ustedes han tomado nota y, algunos, seguramente participado. La verdad es que no llega a su fin, de hecho hace instantes hemos leído una serie de otras opiniones. Y nos pareció importante sentar alguna posición y recordarles, queridos amigos, que cuando los anónimos pasan de castaño a oscuro nos sentimos en la obligación de poner un freno, recordar que nada aportan agresiones gratuitas a otras personas.
De todos lados se han mencionado verdades y opiniones disímiles. Hasta allí, nada que reprochar a nadie, en todo caso acordar o disentir. Pero no queremos ser un vehículo para ventilar rencillas personales o situaciones no resueltas. Las denuncias se hacen con nombre y apellido, dando la cara. De otro modo se transforman en mero chusmerío.
En La Pampa tenemos nuestros señores problemas, con cuestiones que van más allá de diferencias deportivas. Hay evidentemente, enconos personales sin resolver. Y ahora nos enteramos que también los hay en Paraná. Y también han surgido las diferencias entre distintas ciudades que tenemos sóftbol. Novedad ?. Para nada. Esto es tan viejo como el sóftbol mismo en esos lugares, hoy estas posibilidades de comunicación y expresión parecen potenciar las diferencias y resquemores. Parece.
Es innegable la calidad del sóftbol de Paraná, su organización, su infraestructura, su trabajo, su historia. Pero también hemos hecho cosas en La Pampa, en Bahía, Capital y tantos otros lugares. Eso no implica que todos orinemos agua bendita. Mala gente, jugadores, árbitros, dirigentes, charlatanes de feria hay en todos lados. Corren con desventaja aquellos que alguna vez han hecho algo. Esos cosechan adhesiones y muchas veces críticas despiadadas, las que ahora escudadas desde un anónimo por internet parecen potenciarse.
Quien escribe apenas conoce a Tita o a Julio Gamarci. Un elogio o una crítica sería un desatino importante, pero si podemos decirle a ambos algo que seguramente ya saben. Que son parte de las reglas del juego y que seguro es más cómodo quedarse en casa o sentarse en la tribuna, pero que es más reconfortante hacer. Y para los que los denostan, háganlo dando la cara y tal vez sea un aporte verdadero.
A nosotros nos reconfortan las visitas y las opiniones de todos ustedes en el blog. Ahora que tomamos conciencia de ello, deseamos ponernos a disposición de todos, pero para todos también bajo las reglas claras y explícitas por las que nos regimos. Un abrazo. Héctor Esquisatti