Estamos "ahí", apenas veinticuatro horas, un día para el arranque de la fiesta esperada. Mañana, a las 7 de la tarde y con la ceremonia oficial de apertura se pondrá en marcha el IX campeonato mundial junior de la Federación Internacional, en Paraná. Un rato después, a las 20,30, llegará la orden de "play ball" y Argentina debutará ante República Checa.
Sencillo de resumir en un corto párrafo, pero imposible describir con las palabras y brevemente todo lo que esto encierra para el sóftbol argentino, y ni que mencionar el significado para los que desde hace ya años trabajan en la organización del mayor evento de nuestro deporte que se haya realizado jamás.
Atrás han quedado esfuerzos y desvelos, horas de angustias y de alegrías, interminables días de trabajo organizativo y de preparación deportiva. Para unos y otros llegó la hora de la verdad, mostrar el éxito de ese trabajo, tanto fuera como dentro de la cancha. Así de sencillo en las palabras, difícil de mensurar desde acá y con una enorme carga emotiva en los actores directos, nuestros dirigentes de la CAS y la APS y de todos los chicos e integrantes del cuerpo técnico que nos representarán.
Sale decir, sin medias tintas, que lo que va a empezar efectivamente mañana ya es todo un éxito. Por el trabajo de organización, por las gestiones y obras concretadas, por el camino recorrido para la puesta a punto de nuestro equipo y por lo ya vivido, sufrido y disfrutado. "Lo importante no es llegar, lo importante es el camino" pontifica la frase y así lo creemos también, pero estamos seguros que los días que vienen serán aún más inolvidables, con más gozos que sombras.
Desde aquí nos queda aún recorrer el trecho que nos separa de Paraná. Mañana, a esta hora estaremos como tantos, con los cosquilleos propios de la hora y trataremos de transmitir esas sensaciones a los que no van a poder estar. Es nuestro compromiso, como siempre.
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